Serrania de Cuenca
ESPACIOS PROTEGIDOS RED NATURA 2000
Zonas de Especial Proteccion para las Aves (Directiva Aves)
/ Zonas de Especial Conservacion (Directiva Habitat)
Ámbito geográfico |
Ámbito |
Año de declaración |
Superficie oficial |
Castilla-La Mancha
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Terrestre
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2001
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191.361,12
ha
|
La Serranía de Cuenca presenta un paisaje muy singular en el que abundan caprichosas formas geológicas derivadas de la incansable labor del agua sobre las calizas y dolomías. Entre los fenómenos kársticos más impresionantes se encuentran las simas, algunas con un gran desarrollo de espeleotemas, o las formas más evolucionadas de los lapiaces que constituyen tormos y callejones de referencia mundial (?La Ciudad Encantada?, ?Los Callejones de las Majadas? o el ?Tormagal de Muela Pinilla?). En la Serranía de Cuenca se encuentran las manifestaciones de campos de dolinas más destacables de toda España. Estas dolinas kársticas, cerradas por escarpes y localmente conocidas como torcas se encuentran muy bien representadas en las ?Torcas de los Palancares?, ?Lagunas de Cañada del Hoyo? y en las Torcas de Lagunaseca.
La acción erosiva de los principales cauces fluviales sobre las duras dolomías ha originado espectaculares escarpes y hoces.
La mitad norte del espacio, encuadrada en la cuenca hidrográfica del Tajo, se encuentra surcada por sus principales afluentes que han originado importantes hoces como la Hoz de Beteta y la de Tragavivos, labradas por el río Guadiela, el cañón del río Cuervo a su paso por Solán de Cabras, el Estrecho de Priego abierto por el río Escabas o los barrancos generados por el río Trabaque. La mitad sur, perteneciente a la cuenca del Júcar, presenta numerosos farallones rocosos a lo largo de todo su recorrido, como ocurre en el límite sur de la Muela de la Madera. La gran cantidad de agua superficial y subterránea existente, aflora en interesantes manaderos originando lagunas o zonas húmedas de gran interés por sus comunidades de flora y fauna, como la Laguna del Marquesado o la Laguna de Uña.
La precipitación de los carbonatos que contienen las aguas de estos ríos ha dado lugar a distintas formaciones tobáceas de singular belleza teniendo su mejor manifestación en la cascada del nacimiento del río Cuervo.
La Serranía de Cuenca cuenta con las masas forestales de pinar natural continuo más importantes de la Península Ibérica, siendo la especie principal el pino negral o laricio (Pinus nigra ssp. salzmannii). Los pinares de negral constituyen el paisaje más representativo y extenso de este espacio, estando muy asociados a su aprovechamiento maderero.
Las formaciones arbustivas que suelen aparecer asociadas a estos pinares son los aliagares, los guillomares y los bujedales.
En las zonas más altas aparece preferentemente el pino albar (Pinus sylvestris), mientras que en las zonas con sustratos arenosos silíceos está presente el pino rodeno (Pinus pinaster).
También se encuentran bien representados los quejigares (Quercus faginea) y los sabinares, destacando los sabinares de sabina albar (Juniperus thurifera) de Tierra Muerta donde la especie encuentra las condiciones ideales para vegetar sin competencia. Los sabinares de sabina mora (Juniperus phoenicea) dominan las laderas pronunciadas y pedregosas orientadas a solana, mientras que los sabinares rastreros (Juniperus sabina) transforman la superficie de los páramos más altos en una auténtica piel de leopardo dando lugar a formaciones de gran belleza paisajística.
Los matorrales y pastizales aparecen frecuentemente de forma salpicada en el seno de los pinares, estando muy relacionados con la actividad humana, particularmente con el pastoreo. Tal es el caso de las zonas más elevadas de Tragacete, Huélamo, Valdemeca y Zafrilla, en donde las frecuentes tormentas estivales mantienen siempre verdes los pastos de verano acogiendo al ganado ovino trashumante procedente de otras provincias.
En la Sierra de Valdemeca, enclave de naturaleza silícea, aparece un bosque relíctico de roble albar (Quercus petraea), presente también, aunque de forma puntual en Carrascosa de la Sierra, mientras que en la hoz del río Chico (Masegosa), lejos de su área de distribución podemos encontrar algunos ejemplares aislados de Quercus orocantabrica.
También llegan con carácter finícola hacia el sureste el abedul (Betula pendula), así como multitud de helechos y comunidades de brezales y piornales oromediterráneos.
Al refugio de las hoces fluviales, donde se dan unas condiciones microclimáticas propias, aparece una flora singular propia de ambientes eurosiberianos (tilos, tejos, acebos, avellanos, fresnos, olmos de montaña, serbales, mostajos, álamos temblones, etc.).
La Laguna del Marquesado alberga una comunidad de plantas acuáticas únicas en España como Sparganium natans y otras extremadamente raras como Hippuris vulgaris y Utricularia australis. La orla lagunar sustenta magníficas comunidades de grandes cárices amacollados y comunidades megafórbicas de aguas frías destacando en éstas especies como Aconitum napellus, Filipendula ulmaria y Geranium collinum.
En la laguna de El Tobar destacan las comunidades flotantes de nenúfares (Nymphaea alba).
Este espacio alberga uno de los núcleos de distribución de la especie Atropa baetica, considerada En Peligro de Extinción en Castilla-La Mancha debido a sus reducidas poblaciones. Presenta también otras muchas especies de flora amenazada o raras. Especies anfibias como Apium repens, que aparece en charcas temporales someras de montaña, especies propias de turberas como el junco lanudo y la pequeña carnívora (Drosera rotundifolia) o raros helechos como Phyllitis scolopendrium que aparece en zonas rupícolas umbrosas al igual que Convallaria majalis y Actaea spicata.
Destaca la presencia de algunas especies de flora endémica como Armeria trachyphyla (presente solamente en suelos rocosos de Cuenca, Guadalajara y Teruel) u otros endemismos ibéricos como Saxifraga fragilis ssp. paniculata que habita en cortados calizos.
El bonetero de hoja ancha (Euonymus latifolius) también aparece en este espacio de forma relíctica en determinados microhábitat favorables, siendo una especie de distribución muy restringida en la Península Ibérica.
La Serranía de Cuenca alberga una de las mejores representaciones de los árboles monumentales de la provincia de Cuenca, como es el caso de la Zona de Palancares y Tierra Muerta que cuenta con un gran número de ejemplares susceptibles de ser considerados árboles singulares por sus excepcionales dimensiones como es el caso de los ejemplares de Pinus nigra ssp.
salzmannii del Pino Abuelo (cuya edad estimada es de 500 años), el Pino Candelabro o el grupo de pinos del Tío Rojo o las sabinas albares (Juniperus thurifera) como la Sabina de la Majada del Churro, la Sabina Retratá, o el Sabinorro, etc.
El grupo faunístico es muy variado dentro de este espacio. Las rapaces tienen gran relevancia en la Serranía de Cuenca, tanto rupícolas como forestales, con importantes poblaciones de alimoche común, buitre leonado, águila culebrera, águila real, aguililla calzada, azor, águila-azor perdicera, halcón peregrino y búho real.
También son abundantes la chova piquirroja y otras pequeñas aves asociadas a los cantiles, como vencejo real, avión roquero, roquero solitario y rojo, colirrojo tizón, etc. Los grandes pinares ofrecen refugio a las comunidades de pequeños paseriformes forestales como carboneros, herrerillos, mitos, agateadores, pinzones, etc.
En cuanto a los mamíferos, destacan las poblaciones de carnívoros como nutria, gato montés, garduña, tejón, zorro, etc., así como las del endémico topillo de Cabrera, que cuenta en el entorno de la Serranía Media con buenas poblaciones ibéricas, aprovechando las praderas-juncales asociadas a manantiales y pequeños arroyos.
Las colonias de quirópteros, tanto forestales como cavernícolas, abundan en las masas de bosques, así como en las cavidades existentes en la Serranía, como ocurre en la Microrreserva de la Cueva de los Morceguillos, en Valdecabras.
Las especies de ungulados silvestres, tanto autóctonas como introducidas son importantes, destacando por su interés cinegético la cabra montés.
Con respecto a los invertebrados, destaca la riqueza entomológica de la Serranía, especialmente en lepidópteros donde se han llegado a inventariar más de 140 especies de mariposas diurnas, muchas de ellas endémicas y amenazadas como la mariposa apolo (Parnassius apollo), Maculinea arion o la interesante mariposa isabelina (Graellsia isabelae).
Además están presentes insectos endémicos del Sistema Ibérico como el escarabajo Zabrus castroi o el pequeño saltamontes Steropleuros ortegai.
Lucanus cervus y Buprestis splendis, especies amenazadas a nivel nacional dependen de la existencia en los bosques de madera muerta de grandes dimensiones.
El cangrejo de río (Austropotamobius pallipes) cobra un especial interés en este espacio ya que aparece relegado a las cabeceras de arroyos, manteniendo en la Serranía de Cuenca el máximo número de reductos a nivel provincial.
La zona presenta buenas características para albergar a distintas especies de reptiles y anfibios protegidos, tales como la culebra lisa europea, el eslizón ibérico, u otros como sapo partero común, el sapo corredor, el sapo de espuelas, la ranita de San Antón, el sapillo moteado común o el sapillo pintojo meridional.
Dentro de la ictiofauna, cabe señalar la población de trucha común (Salmo trutta) principal reservorio genético de la cuenca del Júcar. Otras especies piscícolas de interés son la boga de río (Chondrostoma polylepis), la colmilleja (Cobitis taenia) y la bermejuela (Rutilus arcasii).
Este espacio Natura 2000 cuenta además con numerosas figuras de protección dentro de la Red de Áreas Protegidas de Castilla La Mancha, entre las que se encuentra el Parque Natural de la Serranía de Cuenca, la Reserva Natural de la Laguna del Marquesado, siete Monumentos Naturales (Hoz de Beteta y Sumidero de Mata Asnos, Serrezuela de Valsalobre, Muela Pinilla y El Puntal, Torcas de Lagunaseca, Palancares y Tierra Muerta, Nacimiento del río Cuervo y Lagunas de Cañada del Hoyo) y la Microrreserva de la Cueva de los Morceguillos. Contacta además con el Parque Natural, LIC y ZEPA del Alto Tajo, que es una continuidad de este espacio natural.
La Serranía de Cuenca es una de las zonas más despobladas de Europa, su actividad económica siempre ha estado vinculada al aprovechamiento maderero de sus bosques y al aprovechamiento de sus pastos a través de una ganadería extensiva de ovino principalmente.
Dadas las características topográficas y climáticas, la agricultura se desarrolla de forma puntual en las zonas más frías del espacio, y con un desarrollo algo mayor en las zonas más bajas basado en el cultivo extensivo de cereal de secano y girasol. El cultivo del mimbre es una seña de identidad de la Serranía de Cuenca donde todavía se cultiva en las vegas de los ríos. El aprovechamiento hidráulico es muy importante en el río Júcar y Guadiela apareciendo distintas infraestructuras como embalses, canalizaciones y saltos de agua que abastecen a diversas centrales hidroeléctricas..
Código |
Nombre del Hábitat |
11476 |
Vegetación anual pionera con Salicornia y otras especies de zonas fangosas o arenosas |
11479 |
Pastizales salinos mediterráneos (Juncetalia maritimi) |
11483 |
Vegetación gipsícola ibérica (Gypsophiletalia) |
11500 |
Aguas oligomesotróficas calcáreas con vegetación béntica de Chara spp. |
11501 |
Lagos eutróficos naturales con vegetación Magnopotamion o Hydrocharition |
11502 |
Lagos y estanques distróficos naturales |
11503 |
Estanques temporales mediterráneos |
11515 |
Brezales secos europeos |
11518 |
Brezales alpinos y boreales |
11520 |
Brezales oromediterráneos endémicos con aliaga |
11521 |
Formaciones estables xerotermófilas de Buxus sempervirens en pendientes rocosas (Berberidion p.p.) |
11522 |
Formaciones montanas de Genista purgans |
11524 |
Matorrales arborescentes de Juniperus spp. |
11532 |
Prados calcáreos cársticos o basófilos del Alysso-Sedion albi |
11536 |
Prados alpinos y subalpinos calcáreos |
11537 |
Prados secos semi-naturales y facies de matorral sobre sustratos calcáreos (Festuco-Brometalia)(*Parajes con notables orquídeas) |
11538 |
Zonas subestépicas de gramíneas y anuales del Thero-Brachypodietea |
11539 |
Formaciones herbosas con Nardus, con numerosas especies, sobre sustratos silíceos de zonas montañosas (y de de zonas submontañosas de la Europa continental) |
11541 |
Prados con molinias sobre sustratos calcáreos, turbosos o arcillo-limónicos (Molinion caeruleae) |
11542 |
Prados húmedos mediterráneos de hierbas altas del Molinion-Holoschoenion |
11543 |
Megaforbios eutrofos hidrófilos de las orlas de llanura y de los pisos montano a alpino |
11544 |
Prados pobres de siega de baja altitud (Alopecurus pratensis, Sanguisorba officinalis) |
11549 |
«Mires» de transición |
11551 |
Turberas calcáreas del Cladium mariscus y con especies del Caricion davallianae |
11552 |
Manantiales petrificantes con formación de tuf (Cratoneurion) |
11553 |
Turberas bajas alcalinas |
11557 |
Desprendimientos mediterráneos occidentales y termófilos |
11558 |
Pendientes rocosas calcícolas con vegetación casmofítica |
11559 |
Pendientes rocosas silíceas con vegetación casmofítica |
11562 |
Cuevas no explotadas por el turismo |
11571 |
Bosques de laderas, desprendimientos o barrancos del Tilio-Acerion |
11572 |
Fresnedas termófilas de Fraxinus angustifolia |
11576 |
Robledales galaico-portugueses con Quercus robur y Quercus pyrenaica |
11577 |
Robledales ibéricos de Quercus faginea y Quercus canariensis |
11579 |
Bosques galería de Salix alba y Populus alba |
11584 |
Encinares de Quercus ilex y Quercus rotundifolia |
11587 |
Bosques de Ilex aquifolium |
11590 |
Pinares (sud-)mediterráneos de pinos negros endémicos |
11591 |
Pinares mediterráneos de pinos mesogeanos endémicos |
11593 |
Bosques endémicos de Juniperus spp. |
21006 |
Bosques mediterráneos de Taxus baccata |